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Mostrando entradas de febrero, 2014

Biosfera profunda

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Distribución geográfica de las perforaciones en las que se ha encontrado vida a gran profundidad En 1992 Thomas Gold publicó su célebre artículo The deep, hot biosphere (la biosfera caliente y profunda) en el que, además de insistir en su controvertida tesis sobre el posible origen abiogénico de los llamados combustibles fósiles (petróleo, carbón y gas natural), proponía un novedoso planteamiento sobre la composición de la biosfera terrestre según el cual todos los organismos que vivimos sobre las masas continentales o en el seno de los océanos no seríamos más que una fracción del total en el planeta. Inflitrados en los materiales subsuperficiales y hasta una profundidad de varios kilómetros parece medrar una cantidad de microorganismos de magnitud comparable a la del total de vida exterior, si no considerablemente superior en términos de biomasa total. Desde entonces, el hallazgo de evidencias de vida en todo tipo d

Contacto extraterrestre

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El contacto del hombre con alguna otra forma de vida extraterrestre, al margen de las propuestas planteadas en la ciencia ficción, es una posibilidad que va creciendo con el desarrollo de misiones espaciales específicamente diseñadas para buscarla, que de momento y en el futuro a medio y largo plazo quedará circunscrita a nuestro Sistema Solar, en alguno de cuyos cuerpos (otros planetas y ciertos satélites) cabe pensar que podrían haberse generado procesos definibles como “vida”. La previsión de este eventual hallazgo es muy grosera, y no contempla las múltiples implicaciones que acarrearía, ni las prevenciones que el encuentro con esa vida precisaría. La ficción científica, principalmente en su manifestación literaria y cinematográfica, ha especulado abundantemente desde hace mucho tiempo en torno a la posibilidad de que se produzca un encuentro de la vida terrestre, con nuestra especie al frente, y alguna otra forma de vida inteligente procedente de lejanos sistemas planetario

Explorando Marte. Análisis de datos del instrumento español REMS

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El tratamiento de los datos de la estación meteorológica REMS, uno de los instrumentos que lleva el róver Curiosity de la misión MSL de la NASA para estudiar la dinámica de la atmósfera de Marte, supone un reto científico que un equipo de investigadores españoles afronta con solvencia desde la llegada de la sonda al planeta. No es difícil imaginar el enorme esfuerzo tecnológico que supone llevar a término una misión espacial, máxime si se trata de enviar un vehículo robótico a otro planeta, aunque sea de la inmediata vecindad como es el caso de Marte (apenas la puerta de al lado en la escala cósmica), pero en realidad hacer aterrizar el ingenio en la superficie del planeta no supone más que un primer paso hacia los objetivos que justifican en última instancia la puesta en marcha de la misión, y que en general son aumentar el conocimiento de algunos aspectos concretos del lugar de destino. Una vez allí, no se trata tan sólo de comenzar las operaciones del vehículo y recabar sin m